En Francia, Citroën está apostado por un solución híbrida con hidrógeno para la electrificación de sus vehículos, tras un desarrollo llevado a cabo en colaboración con Symbio, una joint venture especializada en pilas de combustible creada por Michelin y Faurecia.
La tecnología de hidrógeno está asociada a una batería de iones de litio por un lado y a depósitos de hidrógeno por otro. Cuando el hidrógeno y el aire se ponen en contacto en un catalizador, la pila de combustible genera electricidad y permite alimentar el motor eléctrico generando, como único residuo, vapor de agua. Comparada con una batería, una pila de combustible puede, por lo tanto, ser considerada más como un convertidor de energía que como un dispositivo de almacenamiento.
El hidrógeno proporciona la energía necesaria para una mayor autonomía mientras que la batería de capacidad media permite combinar potencia y prestaciones con la recuperación de energía y la capacidad de recarga.
Una de las principales ventajas es que la batería se sitúa debajo de los asientos y los depósitos debajo del piso sin afectar al volumen de carga. Además, la hibridación permite aumentar la durabilidad del sistema de propulsión y limita el riesgo de quedarse sin batería puesto que la propia batería funciona como reserva de electricidad cuando los depósitos de hidrógeno se vacían.
ë-Jumpy Hydrogen en operación real
El Grupo SUEZ, especialista en preservar la naturaleza, ha probado intensivamente durante durante todo el mes de enero el Citroën ë-Jumpy Hydrogen, y ha destacado sus cualidades en términos de optimización del tiempo de uso del vehículo, versatilidad y velocidad de recarga, utilizando una fuente de energía limpia.
“La nueva ë-Jumpy Hydrogen responde a un uso profesional intensivo gracias a un muy breve tiempo de recarga y su gran autonomía. Esta tecnología es esencial para las soluciones cero emisiones en vehículos comerciales”Richard Meyer, Vehículos Comerciales de CITROËN
La autonomía global de 400 km, por lo que responde a las expectativas del 44% de los clientes del segmento de las furgonetas compactas que declaran recorrer de manera ocasional más de 300 km. La tecnología del hidrógeno es menos sensible al transporte de cargas pesadas, a la velocidad de conducción y a las condiciones climáticas como las temperaturas negativas que reducen la autonomía.
Los ritmo laboral no siempre permite incluir en la jornada largas pausas para recargar, que la recarga no dura más de 3 minutos es una ventaja incuestionable de la ë-Jumpy Hydrogen.
Ofreciendo el confort de conducción único propio del motor eléctrico, ë-Jumpy Hydrogen ha sido todo un descubrimiento muy apreciado por las personas que lo han utilizado: “Nos hemos adaptado muy rápidamente a la conducción suave y silenciosa de ë-Jumpy Hydrogen. No hay ruido del motor ni se sienten ruidos exteriores.»