Desde chiquitos nos machacan con que hay que cruzar las calles en forma perpendicular. Pero en la práctica, lo hacemos mal. Muy mal. En México decidieron adaptar el espacio público y el tránsito al uso real.
La Secretaría de Movilidad del DF pintó sendas peatonales en dioagonal en una de las esquinas más transitadas peatonalmente del casco histórico mexicano. Lo que permite que la gente pueda cruzar en cualquier dirección, gracias a que los semáforos tienen ahora un tercer tiempo en el que se detiene totalmente la circulación de las dos arterias.
Con cámaras estarán analizando el comportamiento de peatones, autos y bicis. Si el cruce diagonal ofrece buenos resultados, podría ser replicado en otros puntos peligrosos de la ciudad.
Pensar en escala humana
El cruce diagonal ya se ha aplicado en Tokio, en Japón. El «cruce de Shibuya» ha sido objeto de diversas observaciones urbanísticas y sociológicas debido a su eficacia para hacer transitar masas de gente.
En la Ciudad de Buenos Aires, se están rediseñando esquinas que son conflictivas para un cruce peatonal «tradicional». El diseño de estas Intervenciones Peatonales, que aún suelen ser extrañas para el automovilista, buscan que caminar sea más seguro, cómodo y agradable.
En el Microcentro, en las Diagonales Norte y Roca, se han extendido las veredas con demarcaciones de pintura reflectiva amarilla, para generar cruces más cortos. A los nuevos espacios se les incorpora macetas, mesas y sillas, con el doble propósito de ganar espacio público y evitar que sea invadido por autos.
Se ganaron casi 1600 m2 para el peatón con nuevos cruces a lo largo de 3 cuadras en Diagonal Roca
Otros ejemplos se dan en Palermo o en la Avenida Warnes, que tiene un trazado fuera del damero, lo que genera varias veces intersecciones de 5 esquinas donde convergen 3 calles. Por ejemplo, en el cruce de con Acoyte y Galicia, un punto de alta siniestralidad, se construyeron isletas de seguridad para permitir el cruce en 2 tiempos, y se demarcaron las áreas peatonales que permitieron impedir el estacionamiento indebido y acortar 4,9 mts. la distancia de cruce.
Adaptar el diseño de las callas al verdadero uso de la gente debería ser la regla, no la excepción, en Buenos Aires hemos ido rediseñando cruces en función de la experiencia peatonal y un cruce de «todo rojo» podría aparecer en el futuroJuanjo Méndez, Subsecretario de Transporte del GCBA
Sin dudas, hay que comenzar a comprender que el «espacio urbano» debe volver a ser «espacio humano».