Más allá del pésimo chiste, los dos siniestros viales que ocurrieron cerca de las 5.30 de esta mañana, pudieron haberse evitado y son producto de la imprudencia y negligencia de conductores profesionales.
En la Panamericana km 27.500, un camión de La Serenísima embistió en forma violenta por detrás al acoplado de otro camión. Al parecer la causa de la colisión fue que el chofer del camión de la empresa lactea se quedó dormido.
En la Aut. 25 de Mayo otro camión repartidor de lacteos de La Serenísima sufre una pinchadura en el neumático delantero izquierdo. El chofer se detiene en banquina pocos metros luego de pasar la bajada hacia Av. Jujuy (podría haber optado por salir de la autopista como se recomienda) y se dispone a cambiar el neumático. Para alertar esta maniobra a los otros conductores se le ocurre poner en calzada uno de los típicos cajones verdes en los que se transporta la leche y yoghurts. Un motociclista no advierte la presencia de este elemento extraño, lo embiste bruscamente y por el impacto fallece en el lugar.
La Ley de Tránsito Nacional obliga la utilización de balizas portátiles (las tipo triángulo son las reglamentarias) para señalizar la detención de un vehículo en emergencia.
CAPITULO IV – ARTICULO 59.-OBSTACULOS. La detención de todo vehículo o la presencia de carga u objetos sobre la calzada o banquina, debido a caso fortuito o fuerza mayor debe ser advertida a los usuarios de la vía pública al menos con la inmediata colocación de balizas reglamentarias