En los inicios fuimos colonia española, pero muy influenciada por el comercio de contrabando inglés. Tendencia que se incrementó mientras la reorganización nacional y el desarrollo y tendido de vías férreas estuvo vinculado directamente a Gran Bretaña.
Fíjense que los trenes y subtes al día de hoy circulan al estilo inglés. La corrupta década del ´30 fue una lucha constante de intereses comerciales entre la vieja Inglaterra y la nueva potencia americana que era Estados Unidos. Entre ambas se repartían empresas de servicios e importación y venta del petróleo para los pocos vehículos.
Pero el paradigma yanqui se afirma cuando el presidente Justo crea en 1935 la Vialidad Nacional y empiezan a trazarse las rutas paralelas a la vías del tren (este fue el comienzo de un largo proceso, que completó Menem en los ´90 y destruyó una inmensa red ferroviaria y le otorgó un poder de choque inconmensurable al sindicalismo camionero).
Sin embargo la fecha de defunción del paradigma inglés fue hace 65 años: el 10 de junio de 1945 se dejó de conducir sobre mano izquierda -como hoy sigue manejándose en Londres y Sudáfrica- y se decretó el sentido del tránsito por la derecha, para reordenar las convulsionadas calles porteñas en las que ya eran mayoría los coches con volante frente a la butaca izquierda. Y esta fecha se tomó para conmemorar el Día de la Seguridad en el Tránsito.