Bolso, mochila, cartera o portafolio. Siempre estamos llevando algo con nosotros y lo más común es «tirarlo» sobre la butaca del acompañante y eso no es seguro. ¿Por qué es peligroso? Circulando a una velocidad de 60 km/h, por la fuerza que se genera en un impacto, cualquier objeto multiplicará 17 veces su peso. Un bolso pequeño de apenas 1 kilo, puede «convertise» en un niño de 5 años.
- Lo más recomendable es poner bolsos y mochilas en el baúl, donde no hay peligro de que impacten con nosotros ante una colisión. Algunos coches traen incluso unas redes de sujeción para que no hagan ruido o se golpeen.
- El lugar más seguro dentro del habitáculo es en el piso detrás de la butaca del acompañante, donde queda casi «atrapado» por el asiento trasero. Además, no se ve desde fuera del vehículo con lo que reducimos la posibilidad del «palo a la ventanilla y manotazo» para que nos lo roben.
- Obviamente que si bien es un espacio de rápido acceso para poder ponerlo o quitarlo, queda incómodo para buscar billetera y monedas. Recomendamos llevar dinero para el peaje, la compra ambulante o malabaristas siempre a mano. Yo no fumo, por lo que los billetes en cambio los dejo dentro del cenicero. Las monedas no van ahí porque luego es insoportable el tintineo en empedrado. Muchos tableros traen diferentes compartimientos con fondo de goma, y en todo caso está la vieja técnica tachera de poner la franela para que no hagan ruido.
- Tema celular. Si no se puede hablar mientras que uno conduce ¿para qué tenerlo en la mano? Nuestras dos manos deben estar totalmente libres para sujetar con ambas el volante. Ojo, con quedarse con el teléfono (y sobre todo también lapiceras) en el los bolsillos del pantalón porque son elementos que podrían lastimarnos gravemente ante un impacto.
¡Que tengan buen viaje!