Y aunque parezca descabellado que lo diga yo, la noticia me alegra. El gobierno de Brasil interpuso una acción civil para que Twitter «suspenda inmediatamente» las cuentas que avisan de la existencia de radares y «el bloqueo definitivo» de cualquier otra que ofrezca información sobre fechas, horas y lugares en los que se sitúen controles policiales de tráfico, por considerar que la «conducta agrede directamente la vida, la seguridad y el patrimonio de las personas en general».
Alertar dónde están los controles lo único que genera es que el conductor infractor no deponga su actitud y conducción temeraria con exceso de velocidad, por ejemplo, hasta tanto su GPS, o estas cuentas de twitter, le alertan dónde tiene que «cuidarse».
Los abogados del estado brasilero sostienen que los controles no son sólo importantes para evitar siniestros viales, sino también para evitar delitos como robo de vehículos, posesión ilícita de armas y tráfico de drogas.
Si la justicia argentina quisiera igualar a la carioca, debería ir por el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli, que presentó con bombos y platillos una aplicación para smartphone con el listado de la ubicación exacta de los controles de las rutas hacia la Costa.
Desde hace 10 años, hablo de tránsito y seguridad vial en radio y este nuevo medio que es twitter a permitido a mucha gente que sigue mis alertas desviar el camino cuando un choque o un piquete genera congestión en su trayecto, ir en búsqueda de otro medio de transporte si el tren no salía, y ojalá también, comenzar a tomar conciencia de la responsabilidad que tenemos detrás del volante y que, sin querer ser cursi, el tránsito lo hacemos entre todos.