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Durante el primer mes de 2011 hubo un 31 por ciento menos de siniestros viales y un 21 por ciento menos de muertes en los mismos, en medio de una temporada que bate todos los récord en cantidad de turistas circulando por las rutas de todo el país.
Este nuevo descenso en los índices de siniestralidad es muy positivo, porque se compara con los buenos resultados de enero de 2010, cuando ya se había logrado bajar un 20 por ciento la cantidad de muertes en las rutas. Ell ministro del Interior, Florencio Randazzo, de quien depende la Agencia Nacional de Seguridad Vial, señaló que la reducción se produjo en un contexto muy particular, con recambios de quincena en los que circularon más de 3 millones de vehículos por las rutas turísticas, con picos de entre 2 mil y 3 mil autos por hora circulando hacia la Costa Atlántica.
Con los controles conjuntos entre ANSV, Gendarmería y policías provinciales también se logró bajar un 15 por ciento las velocidades promedio, se aumentó un 35 por ciento el uso del cinturón de seguridad y un 20 por ciento la utilización del casco, y se redujeron más del 5 por ciento las alcoholemias positivas registradas. Se labraron 24.592 actas de infracción, mientras que se retuvieron 8.384 licencias de conducir y se remitieron 2.423 vehículos por diferentes violaciones a la Ley de Tránsito.
Randazzo consideró que estas cifras permiten pensar que vamos a cumplir con el objetivo de reducir un 50 por ciento la cantidad de muertes en las rutas argentinas en cinco años.
Lo más importante es que la gente comience a tomar conciencia de los peligros y no sea tan sólo el temor a la sanción, porque sino en cuanto se ablanden los controles en marzo podría volverse a los índices normales de siniestralidad.
