Este tipo de calzado, que no está sujeto por detrás del talón, puede quedar atrapados bajo el pedal y generar una colisión.
El calzado elegido debe ser cómodo y por sobre todas las cosas no tiene que entorpecer el normal movimiento de los pies. Recomendamos tener siempre un par de zapatillas en el auto.
Ya en 2008, la aseguradora británica de automóviles para las mujeres Wheels Sheila, había difundido que según una encuesta el 80% de las mujeres usaban un calzado inadecuado para conducir y sólo el 17% mantenían en el coche un par de zapatillas adecuadas para conducir. Lo importante es que no les suceda como la mendocina que impactó contra patrullero por llevar ojotas.
Por su parte, el código de tránsito brasileño penaliza los automovilistas que utilicen un calzado que pueda desprenderse con facilidad de los pies sin sujeción al tobillo (por ejemplo ojotas, sandalias, suecos), aunque no prohíbe conducir descalzo, que también es muy peligroso y hasta ilegal, por ejemplo, en Escocia.
Multas en Mendoza
Desde finales de 2018, la policía mendocina ha comenzado a aplicar multas acorde al decreto reglamentario 326 de la Ley provincial de Seguridad Vial 9024, que en su artículo 19 inciso «c», que detalla que «Se entiende por calzado apropiado aquellos de tipo cerrado o que, siendo abiertos, sujeten la parte anatómica dorsal, plantar y lateral, con suela antideslizante que permita la sujeción a la goma de recubrimiento de los pedales«.
A nivel nacional, la Ley de Tránsito 24.449, no hace referencia al calzado, pero ya han existido por lo menos, condenas civiles por parte de un tribunal bonaerense, luego 10 años de juicio, a un conductor por calzar ojotas.