En lo que va de la gestión de Mauricio Macri ya se han implementado 9 vías preferenciales y carriles exclusivos. Los objetivos y beneficios van desde menor tiempo de viaje hasta mayor seguridad vial y menos contaminación ambiental (algo a lo que todavía no le prestamos mucha atención, pero hay que estar atentos a lo que pasa en Chile y la polución)
El tiempo de traslado en transporte público se redujo desde un 10% hasta un 35%. Por otra parte, debido a la habilitación de las vías alternativas, el tiempo de traslado de los automóviles particulares no sufre cambios. En todas las intervenciones se redujo significativamente el tiempo de viaje del transporte público:
- Avenida Córdoba (entre Reconquista y Medrano). Se redujo el tiempo de viaje en un 25%.
- Avenida Entre Ríos/Callao (entre Av. San Juan y M.T. de Alvear) Se redujo el tiempo de viaje en un 15%.
- Avenida Las Heras (entre Av. Coronel Díaz y Av. Callao). Se redujo el tiempo de viaje en un 10%.
- Avenida Triunvirato (entre 14 de julio y Av. Olazábal). Se redujo el tiempo de viaje en un 15%.
- Avenida Juan de Garay (entre Combate de los Pozos y Lima). Se redujo el tiempo de viaje en un 10%.
- Avenida Pueyrredón/Av. Jujuy (entre Av. Del Libertador y Av. Belgrano). Se redujo el tiempo de viaje en un 35%.
- Avenida Santa Fe (entre Borges y Plaza San Martín). Se redujo el tiempo de viaje en un promedio de 26%.
La reubicación del transporte público de pasajeros en las avenidas contribuye con la seguridad vial, dado que la circulación de colectivos en calles angostas representa mayores riesgos de colisión. Esta medida permite que tanto autos particulares como peatones se trasladen en calles barriales con mayor seguridad.
Según estudios realizados por la Agencia de Protección Ambiental (APRA), la reducción de colectivos circulando por las calles interiores disminuye la contaminación sonora y ambiental, mejorando la calidad de vida de vecinos y transeúntes de la zona. Dadas las características de las avenidas (ancho entre líneas de edificación, vegetación de gran porte, etc), los ruidos y emanaciones de gases y partículas se disipan más rápidamente. A su vez, al distanciarse las paradas de ascenso y descenso a un promedio de 400 metros se reducen las aceleraciones y frenadas constantes de los colectivos mejorando el rendimiento ambiental, tras la reducción de los factores de combustión y la consecuente emisión de gases.