La Dirección General de Tráfico (DGT) de España multó con 30.000 euros al cartel del film Larry Crowne, porque se ve a Tom Hanks y Julia Roberts montados en un scooter sin casco.
Se debe a que la ley de Seguridad Vial española (como así también la argentina) prohíbe la apología de las conductas temerarias: se prohíbe la publicidad que incite a la «velocidad excesiva», a «la conducción temeraria» y a «situaciones de peligro».
Lo extraño es que en la película sí llevan puesto dos cascos muy coquetos, pero lo que quisieron hacer con el afiche fue evocar una imágen clásica de la película de 1953 Vacaciones en Roma, donde Audrey Hepburn y Gregory Peck iban a bordo de una Vespa (obviamente, para esa época) sin protección.
Muchos critican a la decisión de la DGT como estúpida, pero particularmente no la veo desacertada. Las acciones de concientización vial obviamente pierden en la balanza cuando una pareja de actores multifamosos se muestran más que divertidos y cancheros por ir sin casco, y la realidad de hoy es muy diferente a la de 1953, como para pensar en cómo se hubiese debido multar a los locos de Audrey y Gregory.
Otro día hablamos de las terribles consecuencias en seguridad vial que crea la inefable saga de «Rápido y furioso».
Otro día hablamos de las terribles consecuencias en seguridad vial que crea la inefable saga de «Rápido y furioso».