Con los Valles Calchaquíes bañados por un radiante sol, las 36 joyas mecánicas arribaron a Tafí del Valle. Sin que el polvo del camino alcanzara a desdibujar sus armoniosas líneas, los clásicos vehículos ingresaron por Colalao del Valle y tras recorrer las ruinas de Quilmes y visitar el museo de la Pachamama en Amaicha, saludaron a la bandera en El Infiernillo antes de detener su marcha en el hotel Mirador del Tafí. Coupés Mercedes Benz, un impresionante Jaguar descapotable, viejos pero bien conservados modelos de Fiat, algún Alfa Romeo y un par de curiosas Ferrari en colores claros formaban una ordenada herradura siguiendo de camino de acceso hasta la explanada del hotel, donde se estacionó la estrella de la flota. Majestuoso e imponente, un Bentley modelo ’28 recortaba su esbelta figura en la entrada misma del edificio. El encargado de la recepción fue el titular del Ente, Bernardo Racedo Aragón, quien destacó la importancia del evento, único tanto por las características técnicas de los vehículos como por el perfil solidario que le dan sus protagonistas, quienes a lo largo del recorrido, que se inició en Salta, entregaron importantes donaciones en varias escuelas de la región Calchaquí.