Después de años de promesas incumplidas, era dificil creer que la nueva empresa estatal AUBASA cumpliera con el eternamente anhelado tercer carril de la Autopista La Plata. Antes de que llegue junio, ya se puede transitar la tercera vía, en ambos sentidos, entre los km 7 y 20.
Ayudará a descomprimir el tránsito y posibilitará canalizar la producción desde el nuevo puerto platense. Según Gonzalo Atanasof, presidente de AUBASA, una vez finalizada la obra la carga de 4000 vehículos, a una velocidad promedio de 80 km/h, sumará otros 2000 vehículos y la velocidad se elevará a 110 km/h. Con el tercer carril los automovilistas ahorrarán 30 minutos diarios en las horas pico.
La construcción se había iniciado en febrero, por lo que en poco más de 6 meses estaría concluída la promesa frustrada tantas veces. Además, se está realizando la reconstrucción total del acceso a Villa Elisa (que está momentaneamente anulado, y por eso es preciso desviar en Hudson hacia el ramal Gutierrez para ingresar por Camino Centenario). También se trabaja en la construcción de un centro de monitoreo desde donde se controlarán las 90 cámaras de vigilancia, y están previsto la instalación de un moderno sistema de detección de patentes, con lo que se podrá sancionar a quien evada el peaje, donde se incentivará la modalidad de telepeaje, con descuentos a usuarios frecuentes y el otorgamiento de forma gratuita del dispositivo TAG para el pago electrónico (ya está en funcionamiento la opción de pago con SUBE).
Actualmente, el tránsito medio diario anual en el peaje de DockSud asciende a 116.559 vehículos, mientras que en el peaje de Hudson es de 74.396 coches, con el nuevo Sistema de Tránsito Inteligente, se podrá medir el tránsito en tiempo real, lo que permitirá tomar decisiones y actuar en materia de inseguridad, cuestiones climáticas y de seguridad vial. La incorporación de tecnología más importante será el uso de sensores de niebla y lluvia que funcionan como un radar que indica cuándo el camino deja de ser transitable o si es necesario reducir la velocidad máxima permitida, información que se publicará de inmediato en carteles de mensajes variables a lo largo de la traza.
Otro cambio a realizarse por AUBASA es el sistema de iluminación. Las instalaciones tienen 25 años de antigüedad y están pensadas para una autopista de dos carriles. Se cambiará la totalidad de la luminaria por leds, para una reducción del consumo y triplicar la vida útil de la lámpara. En trabajo conjunto con los municipios, se trabajará en erradicar la contaminación visual de la autopista con nuevos puentes verdes, con mallas anti grafiti y vegetación diversa.
La inversión de 115 millones de pesos para los 36 km del tercer carril incluye una “banquina resistente” previendo la futura ampliación a un cuarto carril. Sin dudas éste será el gran galardón -quizás el único- en seguridad vial de la gestión se Daniel Scioli.
La construcción se había iniciado en febrero, por lo que en poco más de 6 meses estaría concluída la promesa frustrada tantas veces. Además, se está realizando la reconstrucción total del acceso a Villa Elisa (que está momentaneamente anulado, y por eso es preciso desviar en Hudson hacia el ramal Gutierrez para ingresar por Camino Centenario). También se trabaja en la construcción de un centro de monitoreo desde donde se controlarán las 90 cámaras de vigilancia, y están previsto la instalación de un moderno sistema de detección de patentes, con lo que se podrá sancionar a quien evada el peaje, donde se incentivará la modalidad de telepeaje, con descuentos a usuarios frecuentes y el otorgamiento de forma gratuita del dispositivo TAG para el pago electrónico (ya está en funcionamiento la opción de pago con SUBE).
Actualmente, el tránsito medio diario anual en el peaje de DockSud asciende a 116.559 vehículos, mientras que en el peaje de Hudson es de 74.396 coches, con el nuevo Sistema de Tránsito Inteligente, se podrá medir el tránsito en tiempo real, lo que permitirá tomar decisiones y actuar en materia de inseguridad, cuestiones climáticas y de seguridad vial. La incorporación de tecnología más importante será el uso de sensores de niebla y lluvia que funcionan como un radar que indica cuándo el camino deja de ser transitable o si es necesario reducir la velocidad máxima permitida, información que se publicará de inmediato en carteles de mensajes variables a lo largo de la traza.
Otro cambio a realizarse por AUBASA es el sistema de iluminación. Las instalaciones tienen 25 años de antigüedad y están pensadas para una autopista de dos carriles. Se cambiará la totalidad de la luminaria por leds, para una reducción del consumo y triplicar la vida útil de la lámpara. En trabajo conjunto con los municipios, se trabajará en erradicar la contaminación visual de la autopista con nuevos puentes verdes, con mallas anti grafiti y vegetación diversa.
La inversión de 115 millones de pesos para los 36 km del tercer carril incluye una “banquina resistente” previendo la futura ampliación a un cuarto carril. Sin dudas éste será el gran galardón -quizás el único- en seguridad vial de la gestión se Daniel Scioli.
