La venta de motocicletas registra un sostenido incremento, desde 2006 ha alcanzado y a veces superado a la de automóviles. La mayoría de los nuevos usuarios se deben a la disconformidad con el transporte público. Este fenómeno ha influido enormemente en el tránsito y, consecuentemente, en las víctimas de los siniestros viales (25% de las víctimas fatales en siniestros viales son motociclistas).
Se estima que en la Ciudad de Buenos Aires circulan alrededor de 100 mil motos, y la gran mayoría estaciona sobre las veredas, quitándole espacio al peatón y obstruyendo esquinas. Por lo que el exponencial aumento de motos requiere el diseño de políticas de ordenamiento, prevención y mejoras a la infraestructura existente de la Ciudad.
Desde lunes 17 de diciembre y durante dos semanas se comunicará a los motociclistas la ubicación de nuevos espacios para estacionar. Se entregarán volantes informativos y se colocarán advertencias en aquellas motos que estén fuera de las áreas habilitadas, que pueden estar ubicadas tanto en calzada como sobre la acera: En los espacios dispuestos sobre la calzada se pinto el cordón de anaranjado, se demarcaron los cajones sobre el asfalto y una moto en el centro; En los espacios dispuestos sobre la vereda se colocaron carteles indicando el espacio permitido para estacionar.
A partir de enero 2013 las motos que estacionen fuera de los lugares habilitados estarán en infracción. La sanción, en principio, recaerá sobre aquellas motos que obstruyan sendas peatonales, veredas, rampas para discapacitados, lugares de ascenso y descenso de pasajeros y espacios exclusivos para camiones de caudales.
Otras medidas para cuidar a los motoqueros
En la 9 de Julio desde San Juan hasta Paraguay, una nueva zona de detención segura exclusiva para motos, antes de la senda peatonal. La medida permite que las motos se sitúen por delante del resto de los vehículos cuando el semáforo está en rojo mediante una línea de detención avanzada.
El programa “Hacete Ver” entrega chalecos reflectivos para los jóvenes que trabajan haciendo repartos nocturnos en moto o bici (en junio se alcanzaron 100 empresas de delivery). También se entregaron chalecos en los operativos de control y los motociclistas pueden solicitar el chaleco vía mail a: dsvial@buenosaires.gob.ar, indicando la dirección del comercio en el que trabajan y el horario y llevando su moto o bici y el DNI.
Desde julio hay un nuevo examen práctico para el otorgamiento de licencias de conducir motos. En él se establecen los conocimientos y aptitudes que los motociclistas deben reunir para circular de forma segura en la vía pública. La prueba va incrementando la dificultad y la velocidad paulatinamente. La evaluación del examen se realiza teniendo en cuenta lacantidad de faltas cometidas y su gravedad clasificándose estas últimas en eliminatorias, medias y leves.
De todas formas, hay tener en cuenta que el 45% de los mensajeros que trabajan en la Ciudad tiene licencia de Provincia. Desde 2009, la Dirección General de Seguridad Vial realiza controles de uso de casco en conductores y acompañantes de motociclistas, en doble turno los 7 días de la semana. Como resultado de los controles, el 92% de los trabajadores en moto que hoy circulan por el área central de la Ciudad utilizan casco, este porcentaje disminuye a un 80% en las zonas barriales.
Además, en los controles se verifica que la moto tenga chapa patente y que el conductor tenga cédula verde, cédula azul si no es titular, licencia de conducir y seguro por responsabilidad civil. Si bien estas exigencias son similares a las de los autos, la realidad indica que en el universo de las motos existe una gran informalidad. Es frecuente encontrar motos que se compraron sin patentar, o que fueron pasando de dueño en dueño sin transferencia.
Por lo que, tras el secuestro que efectúan los inspectores, son muchos los casos en que quien conducía no puede acreditar su titularidad sobre el vehículo y, por ello, las motos quedan depositadas: En promedio, 1 de cada 4 motos secuestradas no se retira y queda secuestrada, por lo que en el predio de la Dirección General de Seguridad Vial en Barracas hay cerca de 300 motos en esa condición, 30% de las cuales fueron secuestradas en 2009.
A partir de la sanción de la Ley 4218 en la Legislatura Porteña, estas motos y todo vehículo remitido en operativos de tránsito que después de un tiempo determinado no hayan sido retirados serán asimilados a los vehículos abandonados definidos en la Ley 342, y después de una intimación final al dueño serán compactados y su chatarra será donada al Hospital Garraham.