Poquito a poco, la empresa -y los gremios- van comprendiendo que Aerolíneas tiene que ser más que una (o dos) línea aérea. Con una capacidad instalada enorme y muy costosa, sumado a la experiencia de una importante dotación de mecánicos propios (es la compañía que en promedio más mecánicos tiene por avión), la nueva unidad de negocios se basa en la comercialización se de turnos y servicios de mantenimiento a otras compañías.
La empresa cuenta con un equipo de 2.350 profesionales técnicos, 4 hangares en Ezeiza (entre ellos el Hangar 5, uno de los más modernos y grandes de la región), y otros 3 hangares en Aeroparque, además de 20 talleres entre los que se encuentran los siguientes: Ruedas y Frenos, Baterías Ni Cd, Gases, Metrología, Aviónica, Tren de Aterrizaje, Equipos de Emergencia y Componentes Hidráulicos, entre otros. La infraestructura se completa con 4 simuladores hidráulicos, 3 estáticos, 5 aulas informatizadas y algo sumamente importante: las correspondientes certificaciones técnicas de los principales organismos regulatorios tanto nacionales como internacionales.
Entre los principales servicios ofrecidos se encuentran los siguientes: mantenimiento general (mayor y menor), mantenimiento de línea, mantenimiento de planta poder, reparación de componentes, capacitación técnica y servicios especiales como boroscopía, lavado de compresores o pesaje de aeronaves. Estos trabajos comprenden todas las tareas de mantenimiento que se le realizan a cada aeronave, tanto las de rutina cada vez que un avión aterriza, como así también las que se hacen cada 18 meses que implican el desarmado completo del equipo.
Hablamos con Máximo Amadeo de Aerolíneas
En el último año, la compañía invirtió 40 millones de dólares en la puesta en valor de sus talleres y equipamiento, y avanzó en la digitalización de los procesos de mantenimiento. Mediante la introducción de nuevas herramientas tecnológicas como ser un nuevo software de gestión (AMOS) o el uso de tablets, se ha logrado optimizar el uso de los repuestos, así como también monitorear las reparaciones y hacer el seguimiento de cada aeronave de acuerdo a los estándares más altos en materia de seguridad operacional.
A fines de mayo, Aerolíneas Argentinas recibió nuevas certificaciones las cuales le permiten reparar en talleres propios los módulos de motores de equipos Embraer (antes debía hacerlo en el exterior) lo que además de generar ahorros por más de 1 millón de dólares, amplía las posibilidades de la compañía para ofrecer dicho servicio a otras empresas.